Sexo después de la menopausia
El sexo después de la menopausia no tiene por qué ser un tema recurrente. En Bonobology, sí. Esta sección profundiza en los aspectos problemáticos, incómodos y a veces dolorosos de la intimidad, y sí, también en los aspectos positivos. Si sufres de dolor durante las relaciones sexuales después de la menopausia, no estás sola. Exploramos por qué ocurre, qué puedes hacer y cómo abordar esas conversaciones difíciles con tu pareja.
La menopausia y el deseo sexual pueden sentirse como una montaña rusa, una de la que nadie te advirtió. Algunos días, hay una chispa; otros, nada. Lo entendemos. Analizamos qué ayuda realmente cuando sientes que no tienes deseo sexual después de la menopausia y cómo redescubrir el deseo sexual sin forzarlo.
También encontrarás opiniones sinceras sobre la excitación femenina después de la menopausia, ya que querer tener relaciones sexuales puede ser confuso en sí mismo. Y hablemos también del aspecto práctico: encontrar el mejor lubricante para el sexo después de la menopausia puede ser un cambio radical, no solo a nivel físico sino también emocional. La atrofia vaginal no es el fin de la intimidad; es un desafío que se puede controlar, no algo que deba definir tu vida sexual.
Este es un espacio seguro donde admitimos que el sexo después de la menopausia puede sentirse diferente, a veces frustrante, pero también puede ser algo más enriquecedor, más consciente y más honesto. Verás historias de mujeres que han experimentado relaciones sexuales dolorosas después de la menopausia y han encontrado la manera de superarlas. Hablaremos de lo que realmente importa cuando la menopausia y el deseo sexual chocan, y por qué está bien llorar, adaptarse y volver a intentarlo.
Si alguna vez te has preguntado por qué la excitación femenina después de la menopausia puede resultar difícil de alcanzar, o cómo manejar la falta de deseo sexual después de la menopausia sin sentirte culpable, aquí encontrarás la solución. Juntos, analicemos el deseo sexual después de la menopausia, veamos qué funciona y recordemos que la intimidad puede evolucionar, a veces de maneras sorprendentes e incluso esperanzadoras.